Características de pacientes con degeneración macular asociada a la edad que presentan una variante inusual en el gen CFH
El proyecto europeo «EYE-RISK», en el que participa la Barcelona Macula Foundation, tiene el objetivo de explorar la combinación de factores genéticos y no genéticos que causan la degeneración macular asociada a la edad (DMAE). Con esta finalidad, es necesario determinar si los pacientes con DMAE se pueden clasificar en distintos grupos de riesgo a partir de información sobre los promotores moleculares de la enfermedad. Investigadores del Centro Médico Universitario Radboud, el Hospital Universitario de Colonia y la Universidad Queen’s de Belfast han publicado recientemente un estudio en la prestigiosa revista JAMA Ophthalmology titulado: «Phenotype Characteristics of Patients with Age-Related Macular Degeneration Carrying a Rare Variant in the Complement Factor H Gene» (‘Características fenotípicas de pacientes con degeneración macular asociada a la edad que presentan una variante inusual en el gen del factor H del complemento (CFH)’).
El riesgo de DMAE está determinado por la combinación de factores ambientales, tales como la edad y el tabaco, y de variantes genéticas comunes e inusuales. Un gran número de estas variantes genéticas se han encontrado en genes que codifican componentes del sistema del complemento. La existencia de variantes inusuales en el gen CFH pueden conllevar un riesgo muy alto de DMAE, un riesgo que es hasta 30 veces mayor para las personas que presentan estas variantes genéticas que para quienes no las presentan. Estudios funcionales han demostrado que estas variantes genéticas pueden conducir a una disminución de la función de la proteína del factor H, lo que posteriormente comporta una disminución de la habilidad para inhibir la activación del complemento. Actualmente, diferentes ensayos clínicos están probando la eficacia que tienen los inhibidores del complemento para evitar la progresión de la DMAE. Se ha postulado que los pacientes con una activación alta del complemento —por ejemplo, debido a que presentan variantes genéticas inusuales en el gen CFH— podrían responder mejor a los inhibidores del complemento que los pacientes con DMAE en general.
En este estudio los autores han querido determinar si los pacientes que presentan variantes genéticas inusuales en el gen CFH tienen características particulares que los diferencien de los pacientes sin dichas variantes en el mismo gen. La descripción de la enfermedad en los portadores con variantes genéticas inusuales en el gen CFH permitiría que los oftalmólogos pudiesen seleccionar, de un modo más eficiente, los pacientes para pruebas genéticas y para tratamientos de inhibición del complemento.
Para este estudio se han seleccionado imágenes y datos genéticos de los pacientes con DMAE de la Base de Datos Genéticos de Europa (EUGENDA). En total, se han incluido 100 ojos de 51 pacientes portadores de variaciones genéticas inusuales del gen CFH, y 204 ojos de 102 no portadores. Los portadores de dichas variantes suelen tener más drusas y más grandes, que a menudo se sitúan fuera de la retina central, particularmente en el lado nasal del disco óptico, y suelen tener drusas calcificadas. Aunque los pacientes portadores de las variantes genéticas inusuales del gen CFH presentan características diferentes de la enfermedad, no es posible diferenciar de forma muy precisa entre portadores y no portadores.
Las características de la enfermedad podrían ayudar a los oftalmólogos a seleccionar pacientes para un cribado genético. Podrían valorar si realizan pruebas genéticas en pacientes con muchas drusas, drusas calcificadas o drusas localizadas en el lado nasal del disco óptico en combinación con otras características del paciente, como la edad de aparición de la enfermedad, las drusas cuticulares en angiografía fluoresceínica y antecedentes familiares positivos de DMAE.
Podéis leer el estudio aquí.