Todos los dispositivos de la marca Apple están preparados para ser utilizados por cualquier tipo de usuario, incluso para aquellos usuarios que tengan problemas visuales u otras discapacidades, ya que desde el momento de adquirir el dispositivo podrá utilizarse con las soluciones de accesibilidad integradas de serie. Para ello se puede configurar desde el inicio de la preparación del dispositivo o bien acceder a “Ajustes/General/Accesibilidad” y elegir la opción que mejor se adapte a tus necesidades.
Un iPhone es mucho más que un teléfono para una persona con discapacidad visual. Podríamos asegurar que es toda una ayuda técnica imprescindible, tanto por la accesibilidad ya incluida de serie, como por el servicio que pueden prestarte todas las posibilidades que ofrecen las Apps en cualquier escenario de nuestra vida diaria. Este dispositivo es apto para todo tipo de usuarios, pero bien hay que dejar claro que para utilizarlo (y según el tipo de usuario y experiencia con dispositivos móviles) se ha de dedicar un tiempo para adquirir el conocimiento de uso y familiarizarse tanto con la solución elegida de accesibilidad, como con el funcionamiento del propio dispositivo y las aplicaciones a utilizar.